Ya os he hablado alguna vez sobre mi pasión por la lectura. Me encantaría ser capaz de contagiar esta afición voraz por los libros a mis gorilas pero también me da miedo agobiarles y que los libros les acaben pareciendo un rollazo. 

El macho alfa y yo les explicamos muchísimos cuentos sin un libro en las manos. Especialmente a la hora de dormir. Algunos, los clásicos, los intentamos rescatar de nuestra memoria con alguna que otra actualización. Tendríais que ver la cara del macho alfa cuando los gorilas le piden que les explique ‘La Bella durmiente’. Él, que viene de una casa de tres chicazos y no ha oído el cuento en su vida. Otros, nos los inventamos. Mi hit es ‘Spiderman y el Porompompero que robaba caramelos’. Y es un reto acordarme de cada detalle cada noche porque no me perdonan ni una.

Los cuentos de mami gorila y el macho alfa les encantan pero no  hemos dejado de lado los cuentos que se pueden tocar: los libros

Por eso, desde muy pequeñitos hemos intentado que los libros formen parte de su día a día. Cuentos suaves con diferentes texturas cuando eran bebés a los que trataban como a un peluche más; libros sumergibles para la bañera que igual sirven para explicar un cuento como para convertirse en un submarino…

Ahora que son más mayores, una vez a la semana vamos a la biblioteca y pasamos un buen rato leyendo tooodos los libros que quieren. Algunos los leo al pie de la letra, otros si son para niños más mayores me los voy inventando según veo los dibujos.

Y ahora hemos descubierto [bueno, los Reyes, nos han descubierto] los libros Pop Up de la editorial Combel. Tenemos el del Castillo y el de la Granja y son geniales porque además de poder explicar el cuento se puede abrir como una alfombra de juegos y tiene diversos personajes troquelados para jugar.

Así, después de explicar el cuento, ellos pueden seguir inventando sus historias durante horas y horas [sí hombre, más quisiera. Vaya! Que están distraídos un buen rato]. En su caso además como son dos, las vacas de la granja pueden ir a hablar con el dragón del bosque del castillo o la princesa va a recoger los huevos de las gallinas al gallinero.

Me parece una idea fantástica y consigue que los peques relacionen la lectura con algo divertido.

¿Qué libros me recomendáis para seguir combinando lectura y juego? ¿qué hacéis para fomentar el amor por los libros en vuestros peques?