Os he hablado alguna vez de decoración infantil. Cuando os expliqué que mis gorilas comparten habitación o cuándo os propuse algunas ideas para un rincón de lectura… y seguramente habrá más porque hoy quiero echarles la culpa a las tiendas de boniteces que con sus fotos en Instagram y Pinterest no paran de crearme necesidades.

Necesidades que, además, no puedo satisfacer [ya sabéis que hasta que no me toquen los euromillones los gorilas no tendrán una habitación tan grande donde quepan todas estas cosas]. Así que vivo en un estado de frustración constante [😉].

Estas son las boniteces que me tienen robado el corazón y también pienso desenmascarar a esos creadores de necesidades.

Escritorio infantil. Conocí vertbaudet cuando una amiga de toda la vida tuvo a sus gemelos [sí. Además de los míos, vivo bastante rodeada de gemelos] hace ya casi once años. Me encantaba hojear el catálogo mientras ella dormía a los bebés y empezaba a soñar con los míos, aunque nunca imaginé que iban a llegar a la vez. Cuando eran peques, les compraba bastante ropa allí y con el tiempo compro menos [voy más a prendas de batalla porque la ropa les dura cero coma] pero he descubierto su sección de decoración. Me encanta. Últimamente sueño con dos escritorios como éste puestos en línea, uno al lado del otro. ¿el problema? Si los pongo en su habitación no les hará falta la escalera para subir a la litera. Podrán hacerlo desde la mesa del escritorio porque la habitación es estrechita. En fin, ya veremos cuando llegue el momento de los deberes como lo hacemos…

Lámpara nube. Lo de Tutete no tiene nombre. Me da pena haberla conocido cuando mis gorilas ya habían dejado el chupete porque ya que llevaba como mínimo 10 chupetes cada vez que salía de casa ¿qué menos que haberlos tenido personalizados? Demasiado tarde. Pero del resto, me lo quedaría todo. Mi última obsesión es esta luz quitamiedos en forma de nube [y los helados, las peras…] y eso que mis hijos no tienen miedo a la oscuridad. Aquí, sí que voy picando de tanto en tanto que no soy de piedra.

Caja para libros con ruedas.  Ya tengo montado el rincón de lectura que os conté [a ver si un día os lo enseño pero es que necesito una cámara con gran angular 😉] y los libros y cuentos no dejan de llegar [estoy enferma] así que una caja cómo ésta de Really NIce Things me vendría fenomenal. 

Vinilo mapamundi. A mis gorilas les fascinan las historias de otras culturas y de largos viajes. Cuando eran más pequeños, les regalaron un globo terráqueo y no veas el repaso en geografía y antropología que tuve que hacer para explicar algo con pies y cabeza cada vez que su dedito señalaba un lugar del globo. Como mi intención es contagiarles mi pasión por los viajes, he decidido ponerles un vinilo mapamundi en la pared de la habitación. Éste de menudos cuadros es una maravilla, pero tengo que decir que acabé comprando otro en Amazon por mucho menos de la cuarta parte [a lo mejor no se despega ni con aguarrás pero…]

Puff infantil. Pues hablando de mapamundis, hace unos meses entré en una tienda multimarca de moda infantil pijilla y aluciné con un puff en forma de globo terráqueo. También os digo que aluciné con el precio. Cuando puede volver a respirar, la dependienta me dijo la marca del puff y lo busqué en Internet con la esperanza de encontrarlo más barato. No sólo no lo conseguí, sino que me metí en un mundo de puffs increíbles. Aquí os dejo la web pero ¡estáis avisados!

¿Vosotros también podéis estar horas y horas navegando por cuartos infantiles ideales en Instagram y Pinterest? ¿Cuáles son vuestros principales creadores de necesidades?