Ilustración de Evelyn Henson

Empieza el año, llega la ola de frío siberiano [o polar, o yo que sé] y yo no paro de pensar en pasar unos días fuera, en desconectar de la rutina [pero si acabas de empezar, sí, ya lo sé…]. Por eso ya hemos empezado a planear nuestras próximas escapadas. Algunas las haremos seguro, otras las seguiremos soñando hasta el día en que se cumplan.

Nieve en la Vall de Núria. El primer contacto con la nieve de los gorilas fue el año pasado y fue un desastre total [aquí os explico por qué] así que nos quedamos con mono de nieve, sobre todo los peques que alucinaron con el poquito rato que pudimos estar. Este año nos escaparemos al Ripollès y cogeremos el cremallera para pasar todo un día en la nieve. Los gorilas están súper emocionados. Esperemos que este año puedan disfrutar de verdad.

Praga para dos. Una de las cosas buenas de cumplir 40 es que cae algún que otro viaje o escapada. El Macho alfa se destapó con un fin de semana para dos en esta increíble ciudad. Se ha hecho esperar [cumplí los 40 en septiembre] pero todo lo bueno llega. Soy una enamorada de Praga y he estado varias veces, la última con el macho alfa unos añitos antes de convertirnos en los papás gorila.

El castillo, el puente de Carlos I, el barrio de Mala Strana… todo el centro tiene una magia especial pero también me encanta la parte más moderna de la ciudad. Haré muchas fotos para daros una ruta de imprescindibles qué hacer en Praga [qué ganas tengo].

Toulouse y la ciudad del espacio. Desde que pasamos tres semanas viajando por Bretaña y Normandía [antes de los gorilas], el macho alfa y yo somos unos enamorados de Francia. No hay un pueblo feo. Con los gorilas hemos viajado por La Provenza y el Sur de Francia, y hemos conocido varias ciudades en nuestra ruta a Alemania [Lyon, Dijon, Bezançon…]. Este año le toca el turno a la Cité Rose, Toulouse.

Foto: Cité de l’espace

Tiene un casco histórico precioso, grandes parques, el río Garona y el canal de Midi y muy cerca está la ciudad del Espacio, un parque temático donde se pueden ver naves espaciales a tamaño real, caminar por la Luna o ver cómo viven los astronautas en la estación espacial internacional. Un planazo.

Más escapadas cerca de casa. La idea es pasar más tiempo en la montaña, en el bosque, en el mar… Desconectar de la ciudad, que nos encanta pero que nos estresa. Aprovechar la cantidad de lugares que nos ofrece Catalunya a menos de una hora de casa. Recorrer en carro de caballos la Fagedà d’en Jordà en La Garrotxa, hacer senderismo en el Montseny, conocer los pueblos medievales de l’Empordanet, ir a la playa en invierno….

Queda pendiente un año más [a no ser que nos toque la lotería] pasar unos días con los peques en Londres, una de nuestras ciudades preferidas del mundo y donde se pueden hacer un montón de planes kidfriendly.

¿Y a vosotros, os pasa como a mí? ¿Acabáis de volver de las vacaciones de Navidad y sólo podéis pensar en qué vais a hacer en las próximas? ¿Qué planes tenéis?